La vida es eso que pasa mientras nos esforzamos en comprender por qué estamos aquí. Hay gente que incluso piensa en la muerte mientras vive. Supongo que como una forma de escapismo, pensar qué hay más allá puede llegar a aliviar algunos estrés.
La vida es una tormenta, así es como yo la veo. Truenos, relámpagos, lluvia que te cala hasta los huesos...y en esa lucha continua, a veces vislumbras un rayito de sol al que te aferras cual garrapata y tratas de estirar como un chicle, porque los momentos buenos, los momentos felices, son así de fugaces y efímeros. La felicidad no es eterna, la felicidad son momentos, son rayos de sol entre las nubes que constituyen nuestra vida diaria.
A veces nos obsesionamos tanto con resguardarnos de la lluvia bajo un paraguas...que los momentos buenos se nos escapan entre los dedos. Y después...solo hay sombra.
Una reflexión necesaria en los tiempos que corren en el que apenas tenemos tiempo para detenernos a mirar el reloj. ¿Qué es la vida? ¿Qué es la felicidad? ¿Qué es la eternidad? Preguntas sin respuesta definitiva, cada uno que responda cómo considere oportuno, pero siempre resguardados de la tormenta que nos sacude sin compasión. Magnífica reflexión, compañera de aventuras y desventuras, un besito de nata y fresa.
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